martes, 19 de enero de 2010

Respuesta al Dr. Gonzalo Himiob S.

Respuesta al Dr. Gonzalo Himiob S.

Respuesta al Dr. Gonzalo Himiob S.


Por: Magda Mascioli G. - Buenos días Dr. Himiob. Gusto en saludarlo de nuevo. He leído su artículo y no puedo menos que comprender y compartir mucha de su molestia, en especial la descrita en los dos primeros párrafos de su escrito. Sin embargo, habida cuenta que alude a los venezolanos (me disculpa que no haga yo separaciones con la frase “venezolanos y venezolanas”, ya que la considero no solo como uno de los emblemas del régimen de Hugo Chávez, en clara utilización de la más ridícula demagogia absurda, sino que es un atropello al idioma de Cervantes) me voy a permitir el hacerle algunas consideraciones. Formula Ud. varias preguntas a saber, la primera y cito: ¿Cómo es posible que todavía, a estas alturas, haya más personas pendientes de los resultados del béisbol nacional, de las telenovelas y de otras fruslerías que de nuestra realidad, sobre todo cuando el país, literalmente, se sumerge en la más absoluta oscuridad? En base a esa pregunta Dr. Himiob, se me ocurren otras que le formulo con el debido respeto: ¿Ha celebrado Ud. en estos 11 años, Navidad y Fin de Año con familia y amigos? ¿Ha celebrado ud. en estos 11 años cumpleaños, ha asistido a fiestas, ha ido al cine, ha ido a comer a restaurantes, ha ido a la playa, a la montaña? ¿Ha visto alguna película por cable o en dvd? Me imagino, sin temor a equivocarme, que aunque sea para alguna de esas preguntas, su respuesta tendrá que ser ¡si! ¿cierto? De acuerdo a su pregunta citada entonces ¿Debería yo o cualquier otro venezolano considerar que Ud. ha estado pendiente de “frusilerías” tal como Ud. ha catalogado la distracción que muchos o pocos venezolanos han tenido? No me parece. Por lo menos yo no me atrevo a cometer esa falta de respeto con ud. Porque si así lo hiciere, estaría desconociendo la labor que ha hecho en diferentes renglones; estaría desconociendo el trabajo que ha llevado a cabo con los presos políticos, la asistencia que ha brindado a los estudiantes atropellados, los escritos que ha interpuesto nacional e internacionalmente, y otra cosas más. Estaría desconociendo la necesidad que tiene su mente, su corazón y su espíritu, en diferentes momentos del día, de hacer un alto para decantar presiones, estados de ánimos, desesperanzas, disgustos, cansancio, indignaciones, que en poco contribuirían a la hora de necesitar mente clara y corazón encendido. No me atrevo a calificar sus momentos de solaz como “frusilerías”. En cuanto a su segunda pregunta, y cito: ¿Cómo es posible que muchos de los que sufren, directamente y sin intermediarios, los abusos y despropósitos de este gobierno ineficiente y autoritario aún se atrevan a defender lo indefendible sobre la base de una lealtad política que no nos está dejando más que inflación, y miedo? Cabría que yo le hiciera la misma pregunta: ¿Cómo es posible que muchos de los que han sufrido y sufren directamente y sin intermediarios LAS CONSECUENCIAS de los abusos, los negociados, las trácalas, las mentiras, los engaños, las burlas y despropósitos de los supuestos lideres de supuesta oposición aún se atrevan, hoy, a defender lo indefendible sobre la base de la lealtad política a individuos que han traicionado la confianza que los ciudadanos les depositaron en sus manos? Y más aun: ¿Cómo es posible que ahora veamos a algunos ser candidatos por el partido Podemos, partido éste que fue uno de los brazos ejecutores de los atropellos más viles hacia la ciudadanía como lo fue la Misión Maisanta, cuyo jefe fue el actual jefe del partido Podemos, Ismael García, y al que pertenece el nunca bien ponderado Juan José Molina, quien sirviera de mandadero “mediador” por ante el Sr. Franklin Brito, cuya situación devino en lo que todos conocemos? Preguntas de las que no pido ni espero respuestas Dr. Himiob, sencillamente porque las respuestas están a la vista de todos los que las quieran ver. Y si a criticar a los venezolanos vamos, solo porque algunas personas en Twitter informan sobre los juegos de baseball, porque otros festejan que el Caracas clasificó, otros lamentan que los Tiburones no hayan obtenido una merecida clasificación o porque otros festejamos que el Magallanes está en la final, entonces, y aquí si se lo digo claramente, espero de Ud. que escriba un artículo sobre el viaje a España de Ledezma, en busca de apoyo para su inexistente candidatura presidencial para el 2012; que escriba otro articulo sobre el alojamiento de Miguel Enrique Otero y Ramos Allup en uno de los hoteles más lujosos en Madrid; y espero, igualmente, que escriba una nota interesante que trate sobre la fiesta de cumpleaños de Manuel Rosales en Perú, la cual tuvo no menos de 300 invitados; fiesta ésta acaecida en un supuesto exilio, supuestamente con muchas vicisitudes. Porque si Ud. juzga con severidad, quizás comprensible pero injustificada, a los venezolanos que AGOBIADOS como Ud. se permiten unas horas de distracción en medio de este caos al igual que Ud. las tiene, entonces tiene obligación moral de escribir acerca de los boatos de los politiqueros de supuesta oposición, quienes supuestamente sufren exilios duros y luchan por el país, cuando a todas luces no son ciertas ninguna de las dos cosas. Porque de otra manera Dr. Himiob, no estaría siendo justo con los venezolanos que como Ud., necesitamos también hacer altos en el camino para poder renovar fuerzas, para poder seguir en medio de muchas vicisitudes que quizás ignora y que probablemente Ud., gracias a Dios, no sufre. Porque no todos los ciudadanos tenemos los mismos problemas, aun cuando haya dos problemas comúnes: Chavez por un lado, y sus cómplices politiqueros de supuesta oposición por el otro. Y recuerde Dr. Himiob: hasta en los confrontaciones más cruentas, los que están en batalla, sea la que sea la índole de la batalla, necesitan momentos de descanso no solo físico, sino descanso mental, descanso de corazón, de ánimo; descanso para llorar, para reir, para dormir, para leer, para ver un juego, una película que nos permita renovar fuerzas. Porque de otra forma, no podríamos seguir. Saludos cordiales.

Referencia: Artículo del Dr. Himiob Santomé http://bit.ly/6w09VP

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