MIEDO O INDEFENSIÓN

Primero lo primero, que no es sino definir y para ellos nos valemos de Wikipedia en la cual se definen como;

• Miedo: una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente o futuro. Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza, y se manifiesta tanto en los animales como en el ser humano.
• Indefensión: es un concepto jurídico indeterminado referido a aquella situación procesal en la que la parte se ve limitada o despojada por el órgano jurisdiccional de los medios de defensa que le corresponden en el desarrollo del proceso. Las consecuencias de la indefensión pueden suponer la imposibilidad de hacer valer un derecho o la alteración injustificada de la igualdad de armas entre las partes, otorgando a una de ellas ventajas procesales arbitrarias.

En primera instancia el régimen y sus agentes no intimidan para que experimentemos miedo, uno de esos que llega al punto de paralizar, el punto en el cual diversos países tienen legislación que ampara las acciones en situación de miedo extremo, sin embargo, con el paso del tiempo o amparado en la cantidad de apoyo el miedo puede sobreponerse, de allí la perversa implantación de un sistema de indefensión, como medida para reforzar esa mortal sensación de miedo.

El estado en la actualidad gobierna todos los poderes, es por decirlo así el nuevo amo del valle, casi como un capitán de barco del siglo XVII se muestra como el representante de Dios y de la Corona y por tanto dueño de la vida y destinos de quienes se someten bajo su mando y es precisamente su error, olvidan nuestra dignidad como personas humanas, así como nuestro invaluable rol ciudadano, obvian el hecho que ellos están allí para servirnos, no son sino nuestros empleados y que con el voto u otros medios los ponemos o quitamos.

Por desgracia como muchos hemos experimentado la coerción y la violencia física a niveles tales que pueden amedrentar a cualquiera, tal vez no por nosotros mismos como sujetos, sino porque su nivel de cobardía es tal que son incapaces de dar el frente de hombre hombre, sino que atacan en grupo, muchas veces bajo amparo de el supuesto manto de legalidad que les confiere el ejercicio del poder por la vía de la votación, pero es su actuación lo que los descalifica como verdaderos representantes de la voluntad popular.

Cada gota de sangre que se derrama sobre nuestra tierra es un grito al cielo clamando por justicia, cada hueso que se rompe, cada voz que es acallada, cada derecho que es arrebatado, hollado o truncado son ladrillos y barras que crecen alrededor de quienes osan usar los poderes del estado para oprimir al ciudadano en vez de ampararlo, nada mas parecido a este régimen en cuanto a horror y opresión que el de los nazis, así como nada mas parecido a este régimen en cuanto a doctrina y enfoques como el soviético y ambos cayeron por su propio peso y por el peso de la justicia.

Como dijo su santidad JP II no tengamos miedo, echémoslo a un lado y salgamos exigir nuestros derechos tanto al régimen como a quienes dicen representarnos, porque los derechos no se mendigan se defienden aun a costa de la vida misma.

Ing. Francisco J González R Msc

Ciudadano Zuliano  

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